Autores: Karsten Krüger & Alba Molas
Año: 2023
El término «competencia» está desempeñado un papel destacado en la configuración de las estrategias de política educativa tanto a nivel de la Unión Europea como de sus Estados miembros. Como suele ocurrir a menudo con los términos situados entre lo político y lo académico, el término mantiene una alta ambigüedad, lo cual conduce a los autores a una reflexión sobre el concepto. La reflexión parte de los diferentes orígenes del concepto y las dificultades de delimitarlo claramente de otro termino clave, las “destrezas” (skills), pero también del término “conocimiento”. Se critica que su ambigüedad abre la vía a la creación de una infinidad de competencias y sub-competencias.
La implementación del enfoque por competencias está enmarcada en cambios políticos y sociales como la globalización, políticas neoliberales, la transformación del estado de bienestar y el abandono del fordismo como punto de referencia para la organización de trabajo. Su uso permite una mayor flexibilidad para adaptar los sistemas de educación y formación a las demandas cambiantes de los mercados laborales. En un sistema educativo y formativo como el alemán -orientado más a principios educativos holísticos-, este cambio de referencia ha provocado fuertes debates entorno al principio profesional (Berufsprinzip) y a la “Bildung”.
Sin embargo, el enfoque de competencias despliega todo su efecto sociopolítico solo en interacción con las tendencias hacia la subjetivización del trabajo y la individualización de la sociedad, que se ejemplifican en las exigencias de optimización de uno mismo que se imponen cada vez más a los individuos (empleados) en la sociedad capitalista.